Convención Ibérica de Reparación del Automóvil

ANECRA (Asociación Nacional de las Empresas del Comercio y Reparación del Automóvil) y CETRAA (Confederación Española de Talleres de Reparación Automóvil) se reunieron el pasado 15 de marzo para celebrar la cuarta Convención Ibérica de Reparación del Automóvil con ocasión de Motortec AI. El encuentro entre las dos instituciones sirvió, una vez más, para estudiar en conjunto los principales problemas del sector permitiendo fortalecer una relación de trabajo que seguirá desarrollándose en el futuro. Durante la jornada se analizaron tres temas de actualidad en el sector.

Formación profesional

El primer tema tratado fue el de la formación del sector. Este es sin duda uno de los principales pilares de actuación de ambas entidades, puesto que permite obtener profesionales más cualificados y competentes.

Se valoró positivamente la iniciativa puesta ahora en marcha en España de la Formación Dual que permite a los jóvenes desempeñar su primera experiencia laboral dentro del proceso formativo. El aprendiz recibe en la empresa una formación práctica. En la escuela se complementan los conocimientos prácticos con bases teóricas. De este modo se adecua la formación a las necesidades de la empresa.

A este respecto tanto
ANECRA como
CETRAA coincidieron en subrayar que la disminución de las ayudas estatales a unos mínimos dificulta en gran medida que las asociaciones puedan desarrollar sus planes formativos por lo que se deberán buscar otras vías de financiación ya que el reciclaje profesional y la formación en las nuevas tecnologías y técnicas de reparación es fundamental para el futuro de los talleres.

Con el objetivo de la mejora de la formación se planteó estudiar la posibilidad de que alumnos españoles y portugueses puedan realizar intercambios escolares a través de programas con fondos comunitarios.

La actuación de las aseguradoras

El papel y la actuación de las aseguradoras fue otro de los puntos clave en el orden del día. La confederación expuso que en nuestro país este colectivo no siempre actúa de forma ética, sometiendo cada vez a más presión a los talleres con sus políticas de tasación, imposición de precios de reparación y desvío de reparaciones a otros talleres. Frente a este dilema, ANECRA aportó una posible solución basada en su propia experiencia. Al enfrentarse al mismo problema, la asociación portuguesa optó por redactar un protocolo de actuación que fue firmado por APS (Asociación Portuguesa de Aseguradoras) representando así un paso importante en el acercamiento entre las compañías de seguros y los talleres asociados de ANECRA. Según el escrito, el último responsable del vehículo es el propietario de dicho vehículo. De esta forma se establecen algunas máximas como la libre elección del taller sin ningún tipo de presión por parte de la aseguradora, o el seguimiento de la reparación por parte de técnicos (designados por la compañía de seguros) desde el comienzo de la reparación hasta su finalización.

En el caso de que algunas reparaciones presenten circunstancias particulares y no se llegue a un entendimiento, se ha establecido un Centro de Arbitraje del Sector del Automóvil, completamente objetivo, para lidiar entre las dos entidades y llegar a un consenso.

El protocolo no sólo alivia notablemente las fricciones entre los dos gremios interesados, sino que también permite simplificar los mecanismos y trámites que afectan a los conductores, los talleres y las aseguradoras.

Los talleres ilegales

La coyuntura económica en ambos países ha fomentado la proliferación de este tipo de talleres y si bien en España se habla de un 20% de
talleres clandestinos, en Portugal la cifra asciende al 50%. Estos talleres representan un claro problema por distintos motivos: favorecen la economía sumergida e incurren en un significativo fraude fiscal, generan una competencia desleal de cara a los talleres legales que sí cumplen con las regulaciones, suponen un peligro de cara a la seguridad vial al utilizar recambios, herramientas y maquinaria insuficiente y/o inadecuada e incrementan el impacto de los vehículos en el medioambiente al no cumplir con la normativa de recuperación y reciclaje.

Para tratar de paliar esta situación con tendencia al alza así como otros asuntos actuales propios del sector de la reparación del automóvil, ANECRA ha redactado un manifiesto que ha sido presentado a la mayoría de los órganos institucionales portugueses. Desde los órganos de soberanía y parlamentarios a la administración pública, pasando por diversas comisiones de ámbito nacional, regional o local, el propósito de la asociación lusa es el de llegar a todos los actores posibles para detener la situación a la que se enfrentan los talleres del país vecino. El documento oficial pretende hacer un llamamiento contundente indicando 14 peticiones a la autoridad competente que abarcan temas de índole tan importante como la concesión de créditos bancarios, la modificación o implementación de algunos puntos en la legislación sobre el proceso de reciclaje o la adopción de nuevas medidas contundentes que permitan combatir a los talleres ilegales.

El documento, traducido y puesto a disposición de los allí presentes, fue acogido con sumo interés por la confederación como apoyo a las futuras acciones que se emprenderán.

Por su parte CETRAA propuso algunas medidas prácticas para la persecución de talleres fraudulentos. Una de ellas proponía que un vehículo rechazado por la ITV debiera presentar una factura de reparación en la siguiente inspección para poder darla por válida.

A modo de clausura de la convención, ambas instituciones no quisieron dejar pasar la oportunidad de agradecer el apoyo de Motortec AI y valoraron muy positivamente la oportunidad que les ha brindado la feria a las dos asociaciones y sus asociados para reunirse, informarse y formarse.